lunes, 14 de septiembre de 2020

En contra de los funcionarios para toda la vida

Nunca he entendido porque se puede tener un puesto de trabajo de por vida; al igual que no entiendo que, por ser hijo de sangre, se pueda tener un puesto fijo de por vida e, incluso, para siempre: por eso no soy ni nazi, ni monárquico. La dignidad profesional tiene que venir del trabajo y demostrarse todos los días.

Aunque mi padre fue funcionario, -al que siempre he respetado y querido-, nunca he entendido que la Administración, por pasar una prueba de conocimientos (todos sabemos que, en muchos casos, están manipuladas favoreciendo a los que ya están contratados), ofrezca un trabajo de por vida.

La Administración que, -si bien tiene buenos funcionarios, aunque no todos-, permite que se tenga un mayor porcentaje de absentismo y que no se trabaje por objetivos.

La última revisión del Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP), -hubo otras antes-, del Real Decreto Legislativo 5/2015, en su artículo 20, establece que se implantará un sistema de evaluación del desempeño como el procedimiento mediante el cual se mide y valora la conducta profesional y el rendimiento o logro de resultados. En ese caso, pensé, se introduce un buen argumento para que aquel funcionario que no hubiese tenido un buen desempeño, hubiese sido despedido.

Pero, prácticamente, ninguna organización publica lo ha implementado con la connivencia de los sindicatos (especialmente, UGT y CCOO). Estos sindicatos están dispuestos a todo para que el empleo público sea de por vida, aunque los empleados no sean eficientes. ¡Vaya sindicatos!

Por ejemplo, no he podido entender como Mariano Rajoy, después de más de treinta años sin ejercer, se haya reincorporado a una plaza de Registrador de la Propiedad, sin haberla ejercido antes durante este tiempo. Pero, Mariano, -líder de un partido corrupto como, también, lo es el PSOE-, ¿Cómo admites reincorporarte a una plaza de funcionario, tras más de treinta años, sin ni siquiera actualizarte?, ¿No se te cae la cara de vergüenza?

El que la Administración permita este tipo de inequidades no tenemos qué admitirlo. ¡Es una autentica desigualdad!

El trabajador privado, que tiene que estar demostrado permanentemente sus capacidades, ve como los funcionarios tienen un trabajo de por vida y ni si quiera se someten a una evaluación del desempeño o al impacto de cualquier crisis económica.

Desde esta ventana llamo la atención de lo injusto de tener funcionarios de por vida. Creo que es necesario que tengan un sistema de rendimiento periódico y, periódicamente, se sometan a una revisión de la necesidad organizativa de sus puestos, de nuevos conocimientos y, sobre todo, de su desempeño.

Cuando fui Director General de la Diputación de Málaga, efectué un estudio externo, donde se demostraba que sobraba más del 25% de la plantilla, se lo comenté al Presidente (Elias Bendodo), pero, ahí siguen: ¿y quién lo paga?... ¿nosotros? (Por cierto, tengo ese informe para quien lo quiera ver).

¡Qué vergüenza!

Sabemos que en el Estado hay muchas funciones ajustadas y necesarias, pero, en general, sobredimensionadas y, en espacial, que sobran muchos funcionarios. ¿Qué va a hacer este Gobierno? Yo se lo digo: ¡Nada! Incrementar los impuestos para seguir manteniendo un buen cultivo de votos.

Otra vez: ¡Qué vergüenza!. ¡Tenemos que movilizarnos!

Antonio Peñalver

Socio director de People First Consulting

www.peoplefirstconsulting.es

 


1 comentario:

  1. Totalmente de acuerdo con el articulo, también me parece recomendable seguir algunas publicaciones de esta web https://pruebaslibres.net/curso-pruebas-libres-administracion-y-finanzas y estar atento a las tendencias actuales

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